El 16 de octubre se celebra el Día Mundial del Anestesiólogo, una fecha destinada a poner en valor la labor de estos especialistas médicos cuya intervención resulta esencial en los procedimientos quirúrgicos. Esta conmemoración reconoce la función vital que cumplen al garantizar que los pacientes no sientan dolor y se mantengan estables durante las intervenciones, cuidando aspectos como la conciencia, la respiración, la presión arterial y la temperatura corporal.
La anestesia es un procedimiento médico en el que se administran fármacos para bloquear la sensación dolorosa en una zona o en todo el cuerpo. Existen principalmente tres modalidades: general, que induce un estado similar al sueño al paciente; regional, que actúa sobre una parte del cuerpo mediante bloqueos locales; y local, que anestesia zonas muy pequeñas como un dedo o una oreja. Cada tipo está indicado según el tipo de intervención y las condiciones propias del paciente.
La anestesiología —también llamada anestesiología y reanimación— engloba todas las tareas que acompañan al procedimiento anestésico y al manejo del paciente durante una cirugía. En el Día Mundial del Anestesiólogo se organizan congresos, jornadas académicas y actividades de divulgación para compartir avances, debatir experiencias clínicas y formar a nuevos profesionales, estimulando una mejora continua en las técnicas y protocolos empleados en la práctica médica.
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